La Gran Logia de Canarias desea que el 2022 sea un año generoso en prosperidad para toda la humanidad. Una prosperidad omnímoda y no solo material. Sócrates afirmaba con razón que la serenidad del alma no la proporciona la riqueza la salud o la fama, ya que éstas solo pueden hacernos felices si son usadas correctamente por un alma excelente. Por ello, sólo la virtud es lo que realmente hace feliz a nuestra alma.
Y que el egregor de los masones, que lleva tallándose poco a poco desde hace cientos de años, siga acompañando a los Hermanos esparcidos por la faz de la Tierra y nos guíe en este año 2022 que está a punto de comenzar.