Cuando las guerras se extienden en casi todos los continentes; cuando las naciones más poderosas parecen sustituir el diálogo por la amenaza y el rearme; cuando las víctimas llenan de horror al mundo y provocan el éxodo de cientos de miles de personas por todo el planeta; cuando las consecuencias las paga la humanidad entera de una u otra forma, desde nuestra Obediencia llamamos a la paz y a la recuperación de los valores fundamentales que garantizan la dignidad y el progreso humanos. Esta carta abierta del Gran Maestro de nuestra Obediencia, el M:.R:.H:. Garibaldi 33 (n.s.), anima a todos los masones de la Tierra a trabajar por ello.
